Encuesta Bicentenario 2008 UC- Adimark: Los chilenos acentúan sus diferencias con América Latina

De acuerdo al sondeo, la opinión pública sigue considerando a nuestro país una verdadera isla dentro de la región, con la que Chile no siente una mayor identificación. Mientras la postura hacia Bolivia se endurece, la percepción respecto de los gobernantes latinoamericanos es lapidaria.

Desde que la Presidenta Michelle Bachelet llegó al Gobierno, se ha preocupado por reforzar una relación con los países de la región que aparecía debilitada desde que su antecesor, Ricardo Lagos, volcara su mirada principalmente hacia el Asia Pacífico, Europa y Estados Unidos, áreas con las que el país firmó una serie de tratados de libre comercio durante su mandato.
Paralelamente, en los últimos años América Latina ha visto florecer una serie de gobiernos que tienen a la "unidad latinoamericana" como uno de sus principales objetivos, al menos a nivel retórico. Un discurso que ha adquirido gran influencia en todo el continente, pero que no se sustenta sobre bases claramente definidas y menos consensuadas.
Frente a este panorama, los resultados de la Encuesta Bicentenario 2008 UC-Adimark arrojan un cuadro muy singular: los chilenos siguen pensando que nuestro país es una isla, en casi todos los sentidos posibles.

Más del 50% de los encuestados concluye que Chile es un país muy diferente del resto de los de América Latina, demostrando una gran desafección hacia el resto del continente y una escasa identificación con nuestros vecinos.

Al parecer, ni siquiera los intentos de Bachelet por participar más en las decisiones de la región pueden cambiar esto, pues el 51% opina que el país no debería actuar en bloque con los otros países.

Claro que el peor golpe es para quienes siguen el ideal unitario "bolivariano" propagado por Hugo Chávez, pues el 75% cree que no existe una cultura o identidad común en el continente.

Este concepto de "excepcionalidad chilena" es, en general, compartido por todos los estratos, siendo las clases media y baja las que se muestran más determinantes al respecto.
Según el sondeo, Chile es único no sólo en comparación con América Latina, sino también en comparación con Estados Unidos y Europa. Esta sensación prevalece cualquiera sea la dimensión.

El 41% cree que Chile es único en cultura, un 38% lo siente así en democracia, otro 38% en religiosidad y un 30% en desarrollo económico.Sin embargo, pese a la sensación de excepcionalidad, los sondeados creen que los países más cercanos a Chile en estas áreas son, precisamente, los de América Latina, salvo por el área económica, en donde los chilenos se sienten más cercanos a Estados Unidos.

Así, pese a la inserción en el mundo y a la actual prioridad que se le está dando a la relación con el vecindario, el mito de la insularidad ha crecido entre los chilenos y hoy, debido al desarrollo alcanzado por Chile en las últimas décadas, se le han agregado las imágenes de fortaleza y seriedad institucional que contribuyen a pensar que Chile es único.

Hoy más que nunca, Chile es una isla.